¿Qué es la propiocepción?
La propiocepción es un término bastante conocido sobre todo en el ambiente deportivo, sobre todo tras una lesión, ya que se debe tener en cuenta para poder recuperarse correctamente de dicha lesión.
Nuestra colaboradora Gema Lozano, nos cuenta la importancia de la propiocepción
Es la capacidad que tiene nuestro cerebro de detectar la posición en la que están todas las articulaciones en cada momento, y el movimiento de cada una de ellas, mateniendo estabilidad articular.
Si me lanzan una pelota para que la coja con una mano, no necesito mirar la pelota ni mi mano para notar que la he cogido. Eso es la propiocepción.
¿POR QUÉ ES TAN IMPORTANTE?
Volviendo al ejemplo de la pelota, si soy un jugador de baloncesto, necesito visualizar el resto del campo mientras boto la pelota, necesito hacer que este “sexto sentido” funcione correctamente, ya que si no, debo hacer uso de la vista para realizar esta acción y perderé coordinación en el resto de movimientos.
¿DÓNDE ESTÁ EL SENTIDO DE LA PROPIOCEPCIÓN?
- En los órganos tendinosos de Golgi situados en los tendones de los músculos esqueléticos, que miden la tensión que desarrolla cada músculo.
- En los receptores de la cápsula articular y los ligamentos de las articulaciones.
- En los receptores de la piel.
- En las neuronas sensoriales del oído interno.
Estos órganos mandan la información a la médula y el cerebro, para que el cerebro envíe órdenes a los músculos para que realicen los ajustes de tensión y estiramiento muscular y el movimiento necesario.
El mecanismo de propiocepción es un proceso que se realiza de forma refleja.
¿CUÁNDO SE PIERDE LA PROPIOCEPCIÓN?
- Lesiones articulares, esguinces.
La propiocepción puede perderse cuando se sufre una lesión articular, por ejemplo un esguince. En estos casos el sistema propioceptivo se deteriora, y la información propioceptiva que llega tanto al cerebro como a las articulaciones disminuye.
De esta manera, la persona es más propensa a sufrir esguinces recurrentes. Siempre hemos oído eso de: “no, si en este tobillo me he hecho muchos esguinces”. En este caso, la propiocepción se ha perdido y no se ha entrenado de nuevo para recuperarla. Además, el deportista verá disminuida la coordinación en el ámbito deportivo.
- Escayolas
En el caso de las fracturas, el miembro escayolado permanecerá varias semanas sin movimiento, y el cuerpo humano deja de mantener lo que no utiliza, con lo cual el sistema propioceptivo se verá alterado, además del tono muscular y del movimiento articular.
- Intervenciones quirúrgicas
Si ponemos el caso de una rotura de un Ligamento Cruzado de la rodilla, en el que hace falta una operación, no sólo hay que esperar que el músculo vuelva a tener la misma fuerza, y que el ligamento quede bien adherido al músculo, sino que la propiocepción ha desaparecido y también habrá que entrenarla.
¿ES POSIBLE ENTRENAR LA PROPIOCEPCIÓN?
Este sistema se puede entrenar perfectamente, con ejercicios específicos. No sólo hay que entrenarlo tras una lesión, sino que si se hace de manera habitual, ayudará a que el cuerpo responda mejor, teniendo mejor tiempo de reacción ante situaciones diversas, mejorando la coordinación, y el equilibrio.
En posteriores artículos os enseñaré ejercicios específicos para mejorar la propiocepción de cada articulación.
Gema Lozano